martes, 20 de enero de 2009

La magia de una criatura inolvidable

Cuando uno recuerda las películas que le llegaron cuando era pequeño, que le llenaron de magia cuando no contaba con ningún conocimiento técnico que pudiese influir en la valoración de una cinta, surgen inevitablemente títulos como éste.

Muchas fueron las películas que, para aquellos que fuimos niños en la década de los 80, nos dejaron huella para siempre. Títulos como "Regreso al futuro", "Los Goonies", "La historia interminable" o "E.T." forman parte ya del recuerdo de todo treintañero que se precie. Sin embargo, pese a que muchos fueron los títulos que nos acompañaron a los niños de tan mítica década, de todos ellos yo me quedo sin duda con éste.

"Gremlins" fue algo más que el capricho "navideño" de Steven Spielberg, fue la magia hecha criatura, la ternura extrema de un Gizmo que todos quisimos tener como mascota (por mucho que el mismo resultase en ocasiones "peligrosamente" especial). Fue, al mismo tiempo, un derroche de ingenio y simpatía que en 1984 fue duramente tratado por algunos de los críticos, al no considerar este título apto para los más pequeños. ¡Cuánto han cambiado los tiempos desde entonces!

Y es que han pasado ya casi 25 años desde el estreno de este título (del cual se rodaría una secuela seis años más tarde) y aún me sorprendo alguna vez tarareando aquella misteriosa musiquilla que nadie entonaba mejor que Gizmo en el interior de su ya mítica caja de cartón.

Místico

3 comentarios:

  1. Me encanta esta película. Tiene unos cuantos ratos estupendos. La idea es genial, un peluche encantador que termina trayéndote a los monstruos del armario super malísimos. Recuerdo especialmente el momento en que la chica le cuenta cómo perdió a su padre en navidad al vestirse de Papá Noel y atorarse en la chimenea, recuerdo lo terrible y tristísimo que me pareció en su momento y la risa que da verlo ahora. ¡Como hemos cambiado!

    ResponderEliminar
  2. Siempre he querido un Gizmo para Reyes y nunca me lo trajeron... Os acordais de ese que venía en la caja, igual q en la peli, y tenías q cuidarlo tal cual? joooo... QUIERO UNO!!! :-(

    ResponderEliminar
  3. La verdad es que yo también recuerdo ese momento, cuando en aquel paseo nocturno se cuenta aquella trágica historia. Creo que a mí también me impactó bastante imaginarme aquello a tan corta edad...

    El muñeco no era lo mismo. Ése no estaba vivo... :-(

    ResponderEliminar