miércoles, 3 de junio de 2009

Respetando la esencia de un libro de culto

La famosa novela de Umberto Eco encontró en esta adaptación cinematográfica un canal perfecto para hacer llegar a aquellos no demasiado aficionados a la lectura una de las mejores novelas de intriga escrita durante los años 80.

Y es que revisando de nuevo la cinta muchas son las cosas que se podrían decir de la obra del francés Jean-Jacques Annaud, entre ellas que su perfecta ambientación (la cual mostraba una Edad Media con toda su dureza y fealdad real), su bellísima fotografía, sus correctas interpretaciones y un brillantísimo guión (levantado en torno a una tenebrosa historia medieval desarrollada entre monjes, abadías y libros prohibidos) se conviertieron en elementos clave para entender el éxito de una película que partía con el handicap de tener que igualar un libro de absoluta referencia.

"El nombre de la rosa" supuso la recuperación para el cine del actor Sean Connery, una estrella de antaño perdida en mediocres producciones que con este título se convertiría en justo ganador del BAFTA de aquel año, así como supuso también el descubrimiento de un Christian Slater que quizá no supo aprovechar para su carrera el espaldarazo de un debut tan brillante como éste.

Desde mi punto de vista, una de las mejores películas medievales de toda la historia del séptimo arte.

Místico

1 comentario:

  1. Coincido contigo y voy más alla... una de las mejores películas basada en una novela... imprescindible...

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